
Bombardeo de cursos y contraataque de la administración. Newsletter diciembre 2015
No estamos en guerra a pesar del titular, pero lo parece, sobre todo desde el segundo semestre de este año. Nos referimos a que está siendo movido en lo que a la oferta de formación a trabajadores en activo se refiere (bombardeo diario de ofertas), es decir, muchas empresas de formación nos invitan a que gastemos los ya conocidos 420€ que como mínimo las empresas y profesionales con empleados a cargo, disponemos. Hasta ahora todo correcto, es normal, por otra parte, que haya esta oferta, ahora bien, lo que no es normal es lo siguiente:
1-. Muchas de las ofertas que recibimos en nuestro email personal o profesional se saltan a la torera el artículo 21 de la Ley 34/2002 (LSSI) el cual, recordamos, indica lo siguiente:
“1. Queda prohibido el envío de comunicaciones publicitarias o promocionales por correo electrónico u otro medio de comunicación electrónica equivalente que previamente no hubieran sido solicitadas o expresamente autorizadas por los destinatarios de las mismas.
– Esto por descontado que la mayoría no lo aplica.
2. Lo dispuesto en el apartado anterior no será de aplicación cuando exista una relación contractual previa, siempre que el prestador hubiera obtenido de forma lícita los datos de contacto del destinatario y los empleara para el envío de comunicaciones comerciales referentes a productos o servicios de su propia empresa que sean similares a los que inicialmente fueron objeto de contratación con el cliente.
– Todos los emails recibidos los han obtenido de forma ilícita. (ni vinculación ni autorización)
En todo caso, el prestador deberá ofrecer al destinatario la posibilidad de oponerse al tratamiento de sus datos con fines promocionales mediante un procedimiento sencillo y gratuito, tanto en el momento de recogida de los datos como en cada una de las comunicaciones comerciales que le dirija.
– La segunda parte del párrafo casi todas lo cumplen
Cuando las comunicaciones hubieran sido remitidas por correo electrónico, dicho medio deberá consistir necesariamente en la inclusión de una dirección de correo electrónico u otra dirección electrónica válida donde pueda ejercitarse este derecho, quedando prohibido el envío de comunicaciones que no incluyan dicha dirección.”
– Esto también se suele cumplir
Conclusión: si nos ponemos a denunciar el 99% de estas empresas de formación o consultoras meten la pata en este precepto
2-. Entendemos que este bombardeo, en parte, tiene que ver con la entrada en vigor de la nueva normativa en 2016 que va a suprimir la formación a distancia (el famoso maletín que te dan, firmas unos documentos y si te he visto no me acuerdo).
Esto va a obligar a que la formación sea presencial u online a través de plataformas, para su mayor control.
3-. Y lo peor de todo para nosotros: a pesar de los dos escritos de la Fundación Tripartita prohibiendo el uso de los fondos de formación (en 2010 y 2012, en este enlace hay un resumen) aún hay empresas de formación y consultoras de protección de datos que siguen ofertando el curso como medio de pago de sus trabajos ( o parte del pago, el resto se hace con facturas simbólicas a precios ridículos).
Tras años luchando y “guerreando” contra esta lacra para el sector de la privacidad por parte de entidades que solo piensan en el dinero fácil y rápido, desde la Administración pública nos han echado una mano. La Asociación Profesional Española de Privacidad (A.P.E.P) y muchos de los asociados que hemos estado al pie del cañón enfrente de este fraude, hemos recibido por parte de la Administración pública, concretamente, de la Dirección General de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, una notificación que incluyo aquí » Acta de sanción uso de fondos de formación para pagar servicios de protección de datos» y que podemos resumir en :
1-. Acta de inspección a la empresa que oferta este fraude e inhabilitación de la misma.
2-. Acta de infracción y devolución de importes a la empresa que se ha beneficiado del fraude.
Por tanto, no caigan en ese fraude, que parece goloso, porque además de costarle el dinero, probablemente el “trabajo” que le hagan, deje muchos interrogantes.
Si son tentados, contacte con nosotros y le explicaremos más en detalle; recuerde que “nadie da duros a cuatro pesetas”.